jueves, 10 de mayo de 2007

SOY

Yo soy el ojo que todo lo ve, el oído que todo lo escucha, soy la mano que toca todo lo visible e invisible, yo habito todos los lugares terrenales, celestes y el inframundo. No, no te confundas ése nunca fue, nunca existió... te hice creer que él era el creador de todas las cosas para demostrarte este día quien es el verdadero iniciador.

Yo soy los sabores que pruebas, yo he vivido desde siempre, ahora y mañana; el futuro lo construyo a partir de tus sueños y los de todos los hombres con premura, el pasado lo reviso con ansia; tejo ambos para crear el ahora, lo analizo para no repetirlo; el presente lo trastoco cada que parpadeas.

Yo soy vida y muerte, soy el centro del universo y sus costas, soy extremo y punto de partida, soy el grano de sal y el planeta a la vez. Frente a mí y aún en mí han pasado ya los seres que vibran, los animales y las ancestrales rocas, los volcanes los vi nacer, las nubes soplé, los muertos yacen dentro mío.

En mis manos solté las primeras células, después de dibujarlas en la arena y tocarlas con la mirada; elegí la vida en el aire porque soy el viento cuya velocidad alcanza hasta los lugares más lejanos de tu vista; llego a sitios tan lejanos que nunca tus herederos podrían imaginar.

Traje a la vida a los antropoides, pero miles de años antes permití el vuelo de dragones, pegasos, el reinado de quimeras, unicornios. Desde aquí llevé de la mano al homo en todas sus variantes, ahora han evolucionado hasta la locura.

Jajajaja, yo te inculqué la adoración de algo que tú denominaste Dioses, les diste personalidades y luego los crucificaste. Mas te los arrebaté porque los creaste orgullosos; no me importó verte desamparado, sin embargo a cambio te di la ciencia y acepté tus errores con la misma alegría que tú creciste hasta convertirte en esto que ahora ves.

Camino sobre el aire, en las aguas de los mares, escalo montañas, cruzo llanuras y desiertos gigantescos, selvas monstruosas. Soy microbio y ballena. El saber que tú dominas y aquello que aún no llega a ti, puedo recitarlo de memoria porque yo te lo regalé.

Sólo yo entiendo eso a lo que tú has llamado los grandes misterios del universo, se qué hay detrás de la luna, qué hay más allá de Orión, de dónde vienes, para qué fuiste creado…

Ten paciencia, todo a su tiempo, sólo te puedo decir que después de la muerte, de tu muerte y la de los demás existe...

Yo soy tu sombra, tus sueños, soy Dios y mito, demonio y ángel, súcubo y alma errante, soy la nada, y el silencio. No tengo nombre, ni ser. Tú llámame El Padre, El Eterno, El Nombre, El Altísimo, El Innombrable, El Generador, El Omnipotente, El Todopoderoso, El Señor, El Santo, El Uno, Dios, Lo Uno, El Hacedor, El Génesis, El Iniciador, Jehová, Aleph, Yahveh, Saturno, Alá, Krishna, Huitchilopoztli, Yemayá, Buda, Zeus, Brahman, Leviatán da igual soy el mismo y ninguno...

Muertos han, vivido han; resucitados todos me vieron una vez cuando les llamé. Traje la vida, la he quitado de un manotazo cada que he querido. Ahora tienes alas y ya vuelas, te has convertido en un ser orgulloso...

Ya estoy cansado, envejezco de tal forma que no me alcanza el tiempo para crear más tiempo. Devoraré tu cuerpo y el de tu raza. Al fin reposaré de mí mismo, de mi perfecta elocuencia, de todo esto que te digo, de mi omnipresencia porque desde ahora ya no seré más quien te digo; igual que aquel quien antes me dejó a mí ser esto que soy, y antes que él otro más, y aquellos otros que idearon sus propias historias, sus seres y su propia muerte.

Regreso a mi forma original, en posición fetal recojo los últimos rastrojos de lo que he sido, en mí cabe todo. Moriré pronto, lo sé, lentamente por esa pesadez que me silencia hasta extinguirme...

MIGUEL G. GALICIA

1 comentario:

Iván Carrillo dijo...

Miermano, yo considero que ya estás llevando este blog a un nivel muy cabrón y solo nos quedan dos opciones: nos ponemos las pilas todos los demás invitados para que la fiesta no nos quede grande o tu comienzas a repartir tus aspirinas de la creatividad. Estás muy cabrón y me da mucho gusto leerte, me he convertido en tu fan.